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Ventajas de la instalación fija de bancos de carga en tus sistemas

Todo sistema necesita una supervisión constante, y más en entornos críticos. Las fuentes de alimentación deben ser comprobadas y deben estar listas para cualquier actuación. 

Para realizar los mantenimientos de los equipos eléctricos se necesita una carga real, para comprobar su correcto funcionamiento. Para esto, los bancos de carga son ideales para la realización de pruebas. Se puede tanto realizar el alquiler de bancos de carga o bien instalar uno fijo para disponer de él 24/7.

A continuación, enumeraremos las ventajas de disponer permanentemente un banco de carga en las instalaciones: 

  1. Mayor eficiencia operativa:

Una de las principales ventajas de los bancos de carga fijos es la mejora de la eficiencia operativa. Los bancos de carga están diseñados para simular las condiciones de carga que los equipos eléctricos experimentarán en situaciones reales. Esto permite realizar pruebas de capacidad y rendimiento de manera más precisa y eficiente. En lugar de conectar dispositivos de prueba de manera temporal, los bancos de carga fijos proporcionan una solución constante y estable, lo que permite realizar pruebas a mayor escala y con mayor precisión sin preocupaciones de disponibilidad de equipos dependiendo de fechas concretas.

Además, al tener una instalación fija, el mantenimiento y las pruebas de los sistemas eléctricos se realizan de manera más rápida, sin necesidad de desconectar equipos o interrumpir operaciones. Esto permite que las empresas y organizaciones sigan operando sin interrupciones, reduciendo tiempos de inactividad y mejorando la eficiencia general de las instalaciones.

  1. Aumento en la seguridad del sistema:

Los bancos de carga fijos no solo contribuyen a la eficiencia, sino también a la seguridad de los sistemas eléctricos. En entornos industriales o comerciales, donde el riesgo eléctrico es una preocupación constante, contar con un banco de carga fijo proporciona un nivel adicional de control. Estos sistemas están diseñados para operar dentro de parámetros de seguridad estrictos, evitando sobrecargas, cortocircuitos o fallos en los equipos.

Los bancos de carga permiten simular situaciones extremas de funcionamiento, lo que ayuda a identificar posibles fallos o puntos débiles en los sistemas eléctricos antes de que se conviertan en un problema grave. Además, al tener una instalación fija, se puede realizar un monitoreo constante de los equipos, lo que reduce el riesgo de accidentes debido a fallas inesperadas.

En instalaciones donde se manejan equipos de alta potencia o energía, como en los centros de datos, tener un sistema fijo también garantiza que la corriente eléctrica que circula por las líneas esté regulada, evitando picos de voltaje que puedan dañar los equipos y causar accidentes irreversibles.

  1. Optimización de la vida útil de los equipos:

El uso de bancos de carga fijos permite optimizar la vida útil de los equipos eléctricos, lo que se traduce en un ahorro significativo a largo plazo. Los bancos de carga permiten realizar pruebas y calibraciones periódicas de los sistemas de alimentación, asegurando que operen dentro de los límites especificados por los fabricantes. Esto evita el desgaste prematuro de las baterías, generadores y otros componentes eléctricos, lo que puede generar costosos reemplazos o reparaciones.

En instalaciones donde los equipos se someten a altas demandas de carga, como en centros de datos, plantas industriales o instalaciones de telecomunicaciones, contar con un banco de carga fijo permite verificar la capacidad de los equipos de alimentación y evitar que estos se sobrecarguen. Esto prolonga la vida útil de las baterías o generadores al mantenerlos operando en condiciones óptimas.

  1. Ahorro de costes a largo plazo:

Aunque la instalación inicial de un banco de carga fijo puede implicar una inversión significativa, a largo plazo puede generar ahorros considerables. Esto se debe principalmente a la capacidad de realizar pruebas preventivas y de mantenimiento sin la necesidad de equipos adicionales o personal externo. Las pruebas regulares realizadas con un banco de carga fijo permiten identificar problemas antes de que se conviertan en fallos costosos, lo que ayuda a prevenir paradas no programadas y daños a largo plazo en los sistemas eléctricos.

Además, al mejorar la eficiencia operativa y optimizar la vida útil de los equipos, las empresas pueden reducir los costes de reparación y reemplazo de equipos eléctricos.

  1. Facilidad de integración con otros sistemas

Los bancos de carga fijos se pueden integrar fácilmente con otros sistemas de gestión de energía, lo que permite una supervisión centralizada y el análisis detallado del rendimiento de los equipos eléctricos. La integración con sistemas de gestión de energía (EMS) permite optimizar el uso de recursos, gestionar las cargas de manera eficiente y coordinar las operaciones de manera más efectiva.

  1. Sostenibilidad y respeto al medio ambiente

La instalación de bancos de carga fijos también tiene implicaciones positivas en términos de sostenibilidad. Los sistemas fijos permiten una gestión más eficiente de la energía, lo que reduce el desperdicio energético. Además, la capacidad de realizar pruebas regulares y mantener los equipos en condiciones óptimas contribuye a la reducción de desechos, ya que los equipos se mantienen operativos por más tiempo y no necesitan ser reemplazados con tanta frecuencia.

Además, los bancos de carga fijos permiten probar equipos de energías renovables, como paneles solares o turbinas eólicas, bajo condiciones controladas. Esto garantiza que dichos sistemas funcionen de manera eficiente, reduciendo su impacto ambiental y mejorando su rendimiento a largo plazo.

Conclusión

En resumen, la instalación fija de bancos de carga en sistemas eléctricos es una práctica beneficiosa para una amplia gama de aplicaciones. Las ventajas de eficiencia operativa, mejora de la seguridad, optimización de la vida útil de los equipos, ahorro de costes y mayor control sobre la capacidad y el rendimiento son solo algunas de las razones por las que cada vez más organizaciones optan por adoptar esta tecnología en lugar del alquiler de bancos de carga. A medida que las demandas energéticas siguen creciendo y las necesidades de mantenimiento y prueba de los sistemas eléctricos se vuelven más complejas, los bancos de carga fijos son una solución esencial para garantizar una operación fluida, eficiente y sostenible de los sistemas e instalaciones eléctricas.

Mantenimientos de bancos de carga, alargando su vida útil

El uso constante de los bancos de carga, junto con la disipación de grandes cantidades de calor, hace que estén sujetos a un desgaste, pudiendo afectar este en el rendimiento de las pruebas, disminuyendo su precisión y poniendo en riesgo los sistemas probados. 

Además, la acumulación de polvo y otros contaminantes en los bancos de carga puede provocar un aumento de la resistencia eléctrica, lo cual reduce su eficiencia y aumenta el riesgo de fallos. Por eso, el mantenimiento regular no solo es recomendable sino necesario para garantizar su fiabilidad y prolongar su vida útil.

Cuando se llevan a cabo pruebas de carga en instalaciones críticas, como hospitales y centros de datos, es vital que los bancos de carga estén en condiciones óptimas. Un banco de carga mal mantenido puede ofrecer lecturas inexactas, lo que genera una falsa sensación de seguridad en los sistemas de respaldo. En algunos casos, una mala calibración puede llevar a decisiones incorrectas sobre la capacidad del equipo de respaldo, poniendo en riesgo la continuidad del servicio en caso de fallo real de energía.

El mantenimiento periódico de los bancos de carga ayuda a prevenir averías costosas. Al detectar problemas menores a tiempo, se evita que se conviertan en problemas graves que podrían requerir reemplazos completos de componentes o incluso del banco de carga entero. Además, los bancos de carga bien mantenidos presentan una mayor eficiencia energética, lo cual reduce el consumo de energía y, en consecuencia, los costes de operación en cada realización de las pruebas.

El mantenimiento de los bancos de carga implica una revisión detallada de diversos componentes que aseguran su funcionamiento. Vamos a repasar los componentes clave a revisar en el mantenimiento de un banco de carga:

1) Resistencias:

Las resistencias son el núcleo de cualquier banco de carga, ya que convierten la energía eléctrica en calor, siendo así un consumidor. Con el tiempo, estas resistencias pueden desgastarse debido a las altas temperaturas que soportan. La inspección visual de las resistencias, junto con pruebas de resistencia eléctrica, permite identificar signos de desgaste o deformación. Sustituir resistencias desgastadas de manera preventiva evita posibles fallos durante las pruebas de carga.

2) Ventiladores para la refrigeración:

El sistema de refrigeración, compuesto por ventiladores, es esencial para disipar el calor generado durante las pruebas. Sin una correcta disipación térmica, el banco de carga puede sobrecalentarse, reduciendo su vida útil o incluso causando daños graves. El mantenimiento de los ventiladores implica la limpieza de estos, el lubricado de los rodamientos y la verificación de su rendimiento. También es importante revisar el flujo de aire y asegurarse de que no existan obstrucciones en la toma del aire ni en la expulsión.

3) Conexiones y componentes eléctricos:

Las conexiones eléctricas que unen los distintos componentes del banco de carga son otro punto crítico. Con el uso, estas conexiones pueden aflojarse o corroerse, aumentando la resistencia y disminuyendo la eficiencia del equipo. Durante el mantenimiento, es necesario revisar estas conexiones, apretarlas si es necesario y limpiar cualquier signo de corrosión. Asimismo, es necesario revisar y chequear todos los componentes eléctricos como los contactores e interruptores.

4) Sistema de control y monitoreo:

La mayoría de los bancos de carga modernos cuentan con sistemas de control y monitoreo, que permiten ajustar los niveles de carga y supervisar el rendimiento. Estos sistemas pueden incluir componentes electrónicos sensibles que deben inspeccionarse y calibrarse periódicamente para asegurar su precisión y fiabilidad.

Frecuencia y planificación del mantenimiento

El mantenimiento preventivo de los bancos de carga debe realizarse según la frecuencia de uso y el entorno de operación. En ambientes limpios y con baja frecuencia de uso, una revisión anual puede ser suficiente. Sin embargo, en sectores críticos como los centros de datos y hospitales, donde los bancos de carga se utilizan con mayor frecuencia, ya que suelen ser bancos de carga de alquiler, se recomienda realizar mantenimientos semestrales o incluso trimestrales.

El mantenimiento preventivo implica realizar inspecciones y reparaciones regulares antes de que aparezcan fallos visibles, mientras que el mantenimiento correctivo se lleva a cabo solo cuando ocurre una avería. Aunque el mantenimiento correctivo puede parecer más económico a corto plazo, la realidad es que las reparaciones de emergencia suelen ser costosas y disruptivas. Un plan de mantenimiento preventivo bien estructurado garantiza una mayor fiabilidad y evita el riesgo de paradas inesperadas, además de permitir una planificación de costes.

Un aspecto fundamental del mantenimiento es la documentación detallada de cada revisión. Mantener un registro de los servicios realizados, junto con observaciones sobre el estado de los componentes, permite identificar patrones de desgaste y anticiparse a posibles problemas. Con un registro histórico, los técnicos pueden prever cuándo un componente puede necesitar reemplazo y planificar las compras con antelación.

Conclusión, el mantenimiento es una inversión en seguridad y longevidad

En definitiva, el mantenimiento de los bancos de carga es una inversión esencial para cualquier organización que dependa de sistemas de respaldo de energía. Al mantener en óptimas condiciones este equipo, se garantiza que las pruebas de carga sean fiables y se minimiza el riesgo de fallos inesperados. Además, un mantenimiento adecuado no solo alarga la vida útil de los bancos de carga, sino que también optimiza su eficiencia, reduciendo costos de operación y prolongando el tiempo entre reemplazos.

La clave está en adoptar un enfoque proactivo y riguroso hacia el mantenimiento, programando revisiones periódicas y siguiendo un plan detallado de inspección. Con la dedicación necesaria y el compromiso con la seguridad y la eficiencia, las organizaciones pueden estar seguras de que sus bancos de carga serán un activo confiable para todas las pruebas y simulaciones de carga necesarias en sus sistemas de respaldo de energía.

Aplicaciones y Beneficios de las Pruebas con Bancos de Carga para Turbinas: Claves para una Operación Eficiente y Segura

En la industria de generación de energía, las turbinas son uno de los componentes más críticos, ya que son responsables de convertir la energía mecánica en eléctrica. Su funcionamiento confiable es vital para asegurar el suministro continuo de electricidad. Para mantener la eficiencia y seguridad de estas máquinas complejas, las pruebas con bancos de carga se han convertido en una herramienta fundamental. Estas pruebas no solo garantizan la operación adecuada de las turbinas, sino que también permiten optimizar su rendimiento, mejorar la confiabilidad de los sistemas, y prever posibles fallos antes de que estos ocurran.

En este artículo, profundizaremos en las aplicaciones prácticas de los bancos de carga en turbinas, los beneficios clave que ofrecen y su importancia en la operación moderna de plantas de energía.

¿Qué nos proporciona los bancos de carga en su uso para turbinas?

Los bancos de carga nos permiten simular las condiciones reales bajo las que la máquina operará, sin necesidad de conectarla directamente a la red o a una carga crítica.

Las pruebas con bancos de carga son esenciales porque garantizan que la turbina, sus generadores y otros sistemas asociados funcionen de manera óptima antes de ser puestos en servicio o tras cualquier mantenimiento o actualización. Las condiciones reales pueden ser replicadas de forma controlada, lo que permite a los ingenieros ajustar parámetros, resolver problemas potenciales y asegurar la confiabilidad del sistema en su conjunto.

Tipos de pruebas con bancos de carga en turbinas:

  1. Pruebas de puesta en marcha:

Cuando una nueva turbina se instala, o una existente se somete a un mantenimiento significativo, es crucial llevar a cabo pruebas de puesta en marcha. Los bancos de carga permiten realizar estas pruebas sin poner en riesgo la red eléctrica o los sistemas de los consumidores. De este modo, se verifica que la turbina y sus componentes cumplan con los requisitos de diseño y las especificaciones del fabricante.

  1. Verificación de la capacidad de generación:

Un banco de carga puede simular diferentes escenarios de demanda eléctrica, lo que permite a los operadores verificar si la turbina puede generar la cantidad de energía esperada en situaciones reales. Esto es especialmente útil en instalaciones de generación de energía distribuida y en plantas de energía renovable, donde las condiciones de generación pueden ser variables.

  1. Pruebas de estabilidad y control:

Las turbinas necesitan responder de manera eficiente a las fluctuaciones en la demanda de carga. Las pruebas con bancos de carga permiten evaluar cómo la turbina responde a estos cambios de carga, asegurando que los sistemas de control pueden manejar la operación con suavidad y sin interrupciones. Esto ayuda a evitar caídas en la generación de energía, fluctuaciones de voltaje o incluso daños en el equipo.

  1. Pruebas de sobrecarga y emergencia:

Es esencial que una turbina pueda funcionar durante cortos periodos de sobrecarga o situaciones de emergencia sin sufrir daños. Los bancos de carga permiten probar estas condiciones extremas de forma controlada, asegurando que la turbina puede soportar exigencias adicionales sin comprometer su seguridad o la estabilidad de la red.

  1. Mantenimiento preventivo:

Las pruebas regulares con bancos de carga también forman parte de los planes de mantenimiento preventivo. A través de estas pruebas, es posible detectar signos de desgaste o fallos incipientes antes de que causen problemas más graves, permitiendo así que las reparaciones necesarias se realicen con anticipación.

Beneficios clave de las pruebas con bancos de carga en turbinas

  1. Mayor confiabilidad y seguridad:

Uno de los beneficios más importantes de las pruebas con bancos de carga es la mejora de la confiabilidad operativa de las turbinas. Al replicar condiciones de operación realistas, los ingenieros pueden identificar y corregir cualquier problema potencial antes de que el equipo entre en funcionamiento en un entorno real. Esto reduce significativamente el riesgo de fallos durante el servicio, lo que a su vez mejora la seguridad del personal y de la planta.

  1. Optimización del rendimiento:

Las pruebas permiten afinar los parámetros de operación de la turbina, lo que maximiza su eficiencia. El ajuste preciso de los sistemas de control, la regulación de la velocidad y la calibración de los generadores permiten que la turbina funcione a su máximo rendimiento, lo que se traduce en una producción de energía más eficiente y menores costos operativos.

  1. Reducción de tiempos de inactividad:

Los fallos en las turbinas pueden ocasionar costosos tiempos de inactividad. Las pruebas con bancos de carga reducen estos riesgos, ya que permiten detectar problemas antes de que estos se conviertan en fallos mayores. Al implementar un plan de mantenimiento basado en estas pruebas, las plantas pueden minimizar los tiempos de inactividad no planificados, mejorando la continuidad del servicio y la productividad.

  1. Ahorro en costes de mantenimiento:

Al detectar problemas en una etapa temprana, las pruebas con bancos de carga ayudan a reducir los costes de mantenimiento correctivo. La capacidad de prevenir fallos y realizar mantenimientos en intervalos programados reduce la necesidad de reparaciones de emergencia, que suelen ser más costosas.

  1. Cumplimiento normativo:

En muchos casos, las pruebas de aceptación y de mantenimiento con bancos de carga son requisitos normativos. El cumplimiento de estos estándares asegura que la turbina y sus sistemas cumplen con las normas de seguridad y eficiencia, lo que es vital para la operación legal y regulada de las plantas de energía.

Impacto en la sostenibilidad y el uso de energías renovables

Las pruebas con bancos de carga también desempeñan un papel crucial en el contexto de la transición hacia fuentes de energía más limpias y renovables. Muchas turbinas se utilizan en sistemas de generación renovable, como las plantas eólicas y solares. En estos casos, las pruebas permiten asegurar que los generadores funcionen de manera confiable y eficiente, incluso cuando la producción de energía puede ser intermitente o fluctuante debido a las condiciones climáticas.

Además, las pruebas ayudan a garantizar que las turbinas sean capaces de integrarse en sistemas de energía más complejos, como las redes inteligentes, donde se requiere una respuesta rápida y eficiente a las variaciones en la demanda de carga. Esto es fundamental para garantizar que la infraestructura eléctrica global pueda soportar el creciente porcentaje de energía renovable en la mezcla energética.

Conclusión

Las pruebas con bancos de carga son una herramienta esencial en el mantenimiento, la optimización y la operación segura de turbinas en la generación de energía. Ofrecen una forma controlada y efectiva de simular condiciones reales, garantizando que los equipos funcionen correctamente antes de ser puestos en servicio. Los beneficios en términos de confiabilidad, rendimiento, ahorro de costes y cumplimiento normativo son evidentes, y su aplicación es cada vez más esencial en un entorno energético en el que la eficiencia y la seguridad son más críticas que nunca.

Para las plantas de energía y las industrias que dependen de la generación continua y segura de electricidad, invertir en pruebas con bancos de carga no solo es una cuestión de cumplimiento técnico, sino también una estrategia para asegurar el éxito a largo plazo.

DCW 2024

Por tercer año consecutivo, asistimos a Madrid Tech Show (Data Centre World Madrid) en Ifema.

Por ello, nos gustaría compartir con vosotros los últimos avances técnicos sobre bancos de carga para el sector de Data Center, así como los próximos cambios en nuestro desarrollo como empresa, que estamos seguros serán muy beneficiosos, para nuestros actuales clientes, así como para los futuros.

Estaremos encantados de atenderos para comentar e informaros sobre nuestras soluciones 100% personalizadas de bancos de carga, tanto en venta como alquiler para el sector del Data Center.

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¡Nos vemos en DCW 2024!

El uso de bancos de carga garantiza la eficiencia de las UPS

Cualquier interrupción en el suministro eléctrico puede tener efectos graves, desde la pérdida de información importante hasta el cese de actividades esenciales. Los Sistemas de Alimentación Ininterrumpida (UPS, por sus siglas en inglés) son fundamentales para asegurar la continuidad operativa al proporcionar energía de respaldo en caso de fallo en la red. No obstante, para que las UPS funcionen correctamente cuando se necesiten, es vital que se mantengan en óptimas condiciones. En este contexto, los bancos de carga juegan un papel clave, siendo una herramienta indispensable para garantizar la eficiencia y fiabilidad de las UPS.

¿Por qué son importantes para las UPS los bancos de carga?

Un banco de carga es un equipo que simula una carga eléctrica gracias a sus resistores en un sistema, permitiendo que este sea probado bajo condiciones de carga real y controlada. Los bancos de carga son utilizados principalmente para probar generadores eléctricos, baterías, y UPS. Respecto a las UPS, un banco de carga permite verificar si este sistema puede manejar la carga esperada en caso de un fallo en la red eléctrica.

La importancia de los bancos de carga está en su capacidad para revelar problemas ocultos en las UPS, que podrían no ser evidentes en condiciones normales de funcionamiento. Una UPS puede parecer estar en buen estado durante su operación diaria, pero solo una prueba bajo carga real puede confirmar su capacidad para proporcionar energía de manera continua y eficiente cuando más se necesite. Esto es especialmente crítico en entornos donde incluso una breve interrupción en el suministro eléctrico puede causar pérdidas significativas, como los centros de datos.

La relevancia de un buen testeo

Uno de los mayores riesgos en la operación de UPS es la falsa sensación de seguridad que pueden ofrecer cuando no se realizan pruebas regulares a estos equipos. Una UPS que no se prueba con regularidad puede fallar en el momento más crítico. Si realizamos mantenimientos mediante bancos de carga, podremos asegurarnos de que todos los componentes del sistema, incluyendo las baterías y el inversor, estén funcionando correctamente y puedan soportar la carga durante el tiempo necesario.

Estas pruebas deben realizarse bajo condiciones que simulen lo más fielmente posible la carga real que la UPS tendría que soportar en caso de una interrupción en el suministro de energía. Esto no solo verifica la capacidad de la UPS para manejar la carga, sino que también ayuda a identificar componentes defectuosos o degradados que puedan necesitar reemplazo o mantenimiento.

Mantenimientos posteriores una vez el centro esté operativo

El uso de bancos de carga para pruebas regulares de UPS también tiene un impacto directo en la prevención de fallos y prolongando la vida útil del sistema. Las baterías, que son un componente crítico de las UPS, tienden a degradarse con el tiempo, especialmente si no se mantienen adecuadamente. Las pruebas de carga permiten identificar baterías que están perdiendo su capacidad de retención de carga, permitiendo su reemplazo antes de que fallen durante una emergencia.

Además, ayudan a detectar otros problemas que pueden afectar el rendimiento de la UPS, como el envejecimiento de componentes electrónicos, problemas en el sistema de refrigeración, o fallos en los ventiladores. Al identificar y corregir estos problemas a tiempo, se puede evitar el fallo total del sistema y asegurar que la UPS continúe operando de manera eficiente por más tiempo. Un sistema de UPS que se prueba y mantiene regularmente es menos probable que falle inesperadamente, lo que reduce el riesgo de costosos tiempos de inactividad y la necesidad de reparaciones de emergencia.

Identificando y reemplazando componentes degradados antes de que fallen, se pueden evitar reparaciones más costosas y prolongadas. En muchos casos, el coste de realizar pruebas regulares con bancos de carga es significativamente menor que el asociado con un fallo en la UPS. Por lo tanto, aunque el uso de bancos de carga representa una inversión adicional en el mantenimiento del sistema de energía, esta inversión se amortiza rápidamente en forma de una mayor fiabilidad y menores costes de operación.

Incrementos de demandas energéticas en la instalación

Debido a evoluciones en la tecnología, la demanda energética se ve aumentada. Los bancos de carga al simular diferentes potencias nos permiten ajustar y dimensionar los sistemas UPS, para así asegurar que puedan manejar cualquier cambio en los requerimientos de energía. Esto es particularmente importante en sectores como los data centers, donde la demanda de energía puede aumentar significativamente en poco tiempo. Una UPS que no se ajusta a las nuevas cargas puede volverse ineficiente o incluso fallar, poniendo en riesgo la continuidad operativa de la instalación. Las pruebas con bancos de carga ofrecen la flexibilidad necesaria para asegurar que la infraestructura energética de pueda evolucionar junto con las nuevas necesidades que surjan.

Conclusión: 

En resumen, el uso de bancos de carga para garantizar la eficiencia de las UPS no es solo una buena práctica, sino una necesidad en un mundo donde la continuidad operativa es fundamental para el éxito de cualquier instalación. Las pruebas regulares con bancos de carga permiten identificar problemas ocultos, prevenir fallos, extender la vida útil del sistema, y adaptar la infraestructura energética a nuevas demandas. 

El coste de no utilizar bancos de carga puede ser alto: tiempos de inactividad inesperados, pérdida de datos, interrupciones en el servicio y daños a la reputación de la empresa. Por lo tanto, los responsables de la gestión de infraestructura energética deben considerar el uso de bancos de carga como una inversión en la fiabilidad y la eficiencia de sus sistemas UPS, teniendo por certeza que estará preparada para mantener las operaciones en marcha sin interrupciones.

¿Cómo trabajan los bancos de carga?

Un banco de carga funciona eléctricamente simulando una carga real que podría aplicarse a un generador, una fuente de energía ininterrumpida (UPS), un sistema de energía, cualquier equipo con motor o una red eléctrica. Para comprender cómo opera, es necesario desglosar su funcionamiento en varios componentes clave:

Componentes principales de un banco de carga:

  • Cargas: El componente principal de los bancos de carga es un conjunto de cargas, estas pueden ser:
    • Resistencias eléctricas: convierten la energía eléctrica en calor. Estas resistencias están diseñadas para soportar altos niveles de corriente sin dañarse y se utilizan para simular cargas puramente resistivas. La resistencia es la única oposición al flujo de corriente, y la potencia consumida es proporcional al voltaje aplicado. En este caso, la corriente y el voltaje están en fase, lo que significa que no hay desfase entre ellos. Es decir, toda la energía es consumida en forma de calor, sin pérdidas adicionales.
    • Inductores: Simulan cargas que involucran campos magnéticos, como motores eléctricos, transformadores o cualquier dispositivo electromagnético. En estos casos, hay un desfase entre el voltaje y la corriente, ya que la inductancia tiende a retrasar la corriente respecto al voltaje. Esto introduce el concepto de «factor de potencia», ya que una parte de la energía no es consumida directamente, sino que es almacenada en los campos magnéticos.
    • Capacitores: Este tipo de bancos de carga simula dispositivos que almacenan energía en campos eléctricos, como los condensadores. En este caso, la corriente precede al voltaje, creando un desfase opuesto al de una carga inductiva. Los bancos de carga capacitiva son menos comunes, pero son importantes para probar sistemas que interactúan con cargas que incluyen elementos capacitivos, como ciertas formas de electrónica de potencia.
    • Combinadas: la existencia de bancos de carga con cargas combinadas facilita la realización de distintas pruebas, pudiendo imitar de manera más realista el comportamiento de sistemas eléctricos en condiciones reales.
  • Ventiladores: Debido a que las resistencias convierten la energía en calor, los bancos de carga incluyen ventiladores para una refrigeración forzada y disipar el calor evitando el sobrecalentamiento. Estos ventiladores más comunes son los axiales (utilizados para mover grandes volúmenes de aire a baja presión) y los centrífugos (se utilizan cuando se necesita generar un mayor flujo de aire bajo presión). Ante requisitos de bajo ruido, presiones si se sitúa en una sala, flujos de aire disponible… se elegirá el adecuado para cumplir con ellos.
  • Control de la carga: Estos dispositivos permiten ajustar la cantidad de carga que se aplica al sistema. Los bancos de carga pueden variar desde simulaciones pequeñas (una fracción de la carga máxima del sistema) hasta la carga completa. Estos controles pueden ser manuales mediante selectores, o digital mediante una pantalla táctil. Nuestro control digital Digiload simplifica el trabajo teniendo la posibilidad de extraer datos para futuros análisis, programar diferentes estados de carga para la realización de pruebas, control mediante ordenador, medición de parámetros… etc.
  • Medidores y sensores: Para monitorear el rendimiento del sistema bajo prueba, los bancos de carga están equipados con sensores de medición de parámetros eléctricos como el voltaje, la corriente, la frecuencia y la potencia. Esto permite evaluar cómo responde el sistema bajo diferentes condiciones de carga.

¿Cómo usar un banco de carga?

  • Conexión a la fuente de prueba: El banco de carga se conecta al generador, sistema de respaldo o fuente de energía que se desea probar. Esto puede hacerse directamente o a través de un panel de control que permite seleccionar la cantidad de carga a aplicar. Además, se deben alimentar los auxiliares de este, bien de forma interna mediante conexión a barras o con alimentación externa.
  • Aplicación de la carga: Una vez conectado, el banco de carga se configura para simular una carga específica. El operador puede ajustar los valores de voltaje y corriente que deben aplicarse al sistema. Los bancos de carga permiten aplicar cargas escalonadas o progresivas para observar el comportamiento del sistema bajo diferentes condiciones de demanda.
  • Conversión de energía eléctrica en calor: En el caso de las cargas resistivas, la energía eléctrica suministrada por el sistema bajo prueba es absorbida por las resistencias, que disipan esa energía en forma de calor. Las resistencias están diseñadas para soportar grandes cantidades de energía sin sufrir daños, y los sistemas de enfriamiento (ventiladores) aseguran que estas no se sobrecalienten.
  • Medición y monitoreo: Mientras se aplica la carga, los medidores y sensores del banco de carga registran parámetros clave como el voltaje, la corriente, la frecuencia y el factor de potencia. Esto permite observar cómo responde el sistema bajo prueba ante diferentes niveles de carga y condiciones operativas. Los datos recopilados ayudan a diagnosticar posibles problemas o limitaciones del sistema energético.
  • Desconexión progresiva de la carga: Al finalizar la prueba, la carga puede retirarse de manera gradual o abrupta, dependiendo de los objetivos del ensayo. Esto permite verificar la capacidad del sistema para reducir su salida o desconectarse sin afectar la estabilidad.

Conclusión

Un banco de cargas es el equipo ideal que disponer en tus instalaciones para la realización de mantenimientos preventivos y pruebas de puesta en marcha a tus equipos. Es crucial usar cargas reales para el testeo y así poder asegurar el funcionamiento correcto.

Somos parte de PORTUGAL DC

Como novedades de este 2024, nos hemos unido como nuevos asociados de la parte de industria a la asociación PORTUGAL DC.

PORTUGAL DC es una organización independiente y sin ánimo de lucro, fundada en 2023, que representa a las empresas que forman parte del ecosistema de Centros de Datos en Portugal. Esta asociación se creó para agrupar todas estas organizaciones creando así una red para fomentar la innovación, la sostenibilidad y la colaboración en este sector.

Nuestro objetivo, formar parte de los proyectos en Portugal gracias a nuestra experiencia en servicios de commissioning de equipos críticos (generadores, UPS…) con nuestra flota de alquiler, y con nuestros bancos de carga en la modalidad de venta, teniendo así más visibilidad de los proyectos en esta parte de la península Ibérica, pertenecientes a sector que hoy en día continúa y continuará en auge, gracias a las evoluciones tecnológicas.

RESISTENCIAS DE PLANCHA VS. RESISTENCIAS EN HILO

El elemento principal en los bancos de carga, sin duda alguna, son las resistencias de las que está compuesto. Estas resistencias se encargan de absorber energía y transformarla en calor, produciendo así un consumo.

Estas resistencias se agrupan en packs para ir formando los diferentes paquetes de los que se acaban conformando una columna de resistencias.

Su fabricación puede realizarse de distintas maneras, las más usuales son en plancha o en hilo, existen diferencias entre estos tipos que explicaremos a continuación:

  • Resistencias en hilo: se trata de resistencias fabricadas en hilo y bobinadas sobre un núcleo cerámico en forma de tubo que actúa como soporte. Al formar un helicoide existe una superficie de contacto grande, y, por tanto, una mayor resistencia eléctrica. Dependiendo de la longitud y del diámetro del hilo se consigue mayor o menor resistencia, hilos más delgados ofrecen una mayor resistencia que los más anchos, e hilos más largos generan un aumento asimismo de la resistencia. Se suelen emplear aleaciones de materiales tales como cromo-aluminio, níquel-cromo, son materiales con alto punto de fusión para soportar las altas temperaturas y con alta resistencia a la oxidación. Pueden operar hasta temperaturas de un aproximado de 450ºC (dependiendo del material).
  • Resistencias en plancha: este tipo de resistencias se fabrican en láminas que ofrecen una distribución uniforme del calor a lo largo de toda su superficie, por lo que aseguran un calentamiento homogéneo. Las planchas poseen mucho material activo que es una ventaja para aguantar las sobretensiones Los materiales más usados para su fabricación son níquel-cromo, cobre-níquel o acero inoxidable. Este tipo de resistencias no tienen problemas de pérdidas de aislamiento como en las resistencias en hilo tubulares, ya que los aisladores de cerámica se instalan en la parte fría de la resistencia, que no se ven afectados por el calor. El rango de temperatura de trabajo aumenta respecto a las resistencias en hilo hasta prácticamente 550ºC. Pueden soportar sobrecargas temporales sin dañarse, incluso con una parada inesperada del ventilador, ya que no es necesario un cooling down. Este tipo de resistencias aseguran un rendimiento consistente gracias al bajo Coeficiente de Temperatura, el cual se puede ver disminuido dependiendo de los materiales. Su construcción es muy robusta y, por tanto, insensible a las vibraciones. En la plancha se realizan unas hendiduras mecánicamente dependiendo del valor óhmico requerido y se sueldan entre ellas para formar los paquetes de resistencias.

En Telema fabricamos nuestras propias resistencias, y apostamos por la fabricación en plancha de estas en nuestra fábrica, ya que gracias a su alto material activo se proporciona un bajo coeficiente de variación frio/caliente lo que hace un funcionamiento más seguro y con mayor vida útil de las resistencias en comparación de aquellas fabricadas en hilo.

Nuestros depósitos de combustible

¡Suministro asegurado para momentos cruciales con nuestros depósitos de combustible! 

En Telema Energy Services, entendemos la importancia de contar con un suministro de energía constante y confiable. Por eso, presentamos nuestros depósitos de combustible de Dymac Global Solutions, especialmente diseñados para alimentar grupos electrógenos, ofreciendo un rendimiento excepcional en cualquier situación.

Características clave:

  • Capacidad optimizada: Nuestros depósitos están diseñados para maximizar la capacidad de almacenamiento de combustible, garantizando un suministro prolongado durante cortes de energía o situaciones de emergencia. Diferentes capacidades disponibles según los requerimientos de tu equipo.
  • Construcción robusta: Fabricados con acero y materiales de alta resistencia, nuestros depósitos son duraderos y capaces de soportar las condiciones más exigentes, asegurando la integridad del suministro de combustible en todo momento.
  • Sistema de dispensación eficiente: Incorporamos tecnologías avanzadas en la dispensación de combustible para garantizar un flujo constante y eficiente, lo que se traduce en un rendimiento óptimo del generador eléctrico.
  • Transporte seguro: Nuestros depósitos se pueden transportar de una manera fácil y segura incluso en plena carga.
  • Combustible dual: Gracias a los modelos duales podrás disponer de dos combustibles en el mismo depósito, diésel y AdBlue a tu alcance en un solo equipo.

No dudes en contactarnos para un asesoramiento a medida.